Es sorprendente como llegan a consultar muchos padres preocupados porque
en el colegio le han dicho que su hijo o hija tiene Déficit Atencional, sobre
todo en marzo cuando ingresan al colegio después de largas vacaciones donde
pudieron dar rienda suelta a sus impulsos, ideas, juegos, experimentos,
aventuras y creaciones.
El colegio impone una rutina muy distinta a la que se
da en periodo de vacaciones y al igual como al adulto/a le cuesta regresar a la
rutina de su jornada laboral después de 3 semanas de vacaciones, a la mayoría
de los niños y niñas les cuesta adaptarse
a la rutina del colegio después de 3 meses de vacaciones.
El Déficit Atencional es un
término que se ha mal utilizado para estigmatizar a niños/as como “tontos”,
“flojos”, “desconcentrados”, “desinteresados”, “porfiados”, “sordos”, “niños/as
problemas”, etc. Y en el ámbito escolar existe un sobre diagnóstico con la
aplicación abreviada del Test De Conners.
En términos simples se trata de
una dificultad para administrar la inteligencia. Entendiendo que existirían 2
tipos de inteligencias, una del conocimiento, la lógica; Y otra, la inteligencia
emocional, social. El Déficit Atencional se trataría de la dificultad que se
presenta en ambas.
También es común asocial el
Déficit Atencional con la hiperactividad. Si bien es cierto que algunos
niños/as que presentan este síndrome, también presentan una actividad motora
exacerbada, es sólo la minoría. Más bien los niños/as son inquietos y es
inherente a su condición de niños/as. Incluso es un indicio de un sano
desarrollo. La Hiperactividad se presenta cuando generalmente hay un alto
componente de ansiedad e impulsividad. Entonces, el Déficit Atencional puede
tener un origen neurológico, emocional y/o reactivo al medio. Y si pensamos que
vivimos en una sociedad rápida, a veces caótica y los adultos/as funcionamos un
poco así –hiperactivos-no es raro que nuestros niños/as también lo sean.
Para reconocer el Déficit
Atencional:
1- Ocurre
en 2 o más ambientes. Así que si sólo ocurre en la escuela, no es DA. Puede ser
otra cosa, generalmente de origen socioemocional.
2- La
atención cuesta enfocarla no sólo en tareas escolares sino también en los
juegos. Lo que causa mucho malestar y frustración en los niños/as porque son los
juegos los que más disfrutan. Además, por lo mismo, los demás niños/as lo aíslan,
provocando en el niño/a con DA, sensación de rechazo de parte de sus
compañeros/as.
3- Entienden
las instrucciones de tareas o reglas del juego, pero son incapaces de
seguirlas. Se muestran olvidadizos. Finalmente evitan esas actividades.
4- MUY
IMPORTANTE: No podemos hablar de DA en niños/as menores de 6 años. Ya que a esa
edad es cerebro está en pleno desarrollo
y es necesario cierta maduración neurológica para poder hablar de DA.
Y el Déficit Atencional con
Hiperactividad (DAH):
1- Una
notable dificultad para mantenerse quietos. Mueves constantemente manos, pies,
se paran constantemente, no pueden esperar turnos, atropellando a los otros
niños/as. No logran relajarse.
2- Hablan
demasiado, sin logran interactuar en conversaciones sino que irrumpen, no
logran esperan que se haga una pregunta y ya contestan.
¿Qué podemos hacer?
Existe tratamiento eficaz.
Si bien es una condición para
toda la vida, con un adecuado tratamiento se puede regular los síntomas de
manera que el niño/a, joven o adulto/a logre funcionalidad en su contexto.
Hay que desmitificar que sólo el
uso de un fármaco (Ritalin, u otros, según el laboratorio) va a acabar con el DA.
El tratamiento es integral y es necesario:
1- Apoyo
de los padres. Esto es estar informados del DA y cómo ayudarlo
(Psicoeducación). Padres que conocen esta condición, estarán más dispuesto a
tener más paciencia, a dar instrucciones cortas y precisas; no exigirles largos
periodos de atención en actividades o en sólo una cosa; evitar los sermones y
consejos tales como “concéntrate en una cosa”, porque realmente no pueden y eso
ocasiona más frustración el el niño/a y por lo tanto sensación de incomprensión
desde los padres, ofuscación con ellos y por lo tanto distancia emocional.
2- Apoyo
desde la escuela. Profesores informados de que el niño/a tiene DA, deberían
tomar medidas como las indicadas para los padres. No centrar el desempeño del
niño/a en el rendimiento escolar es muy importante. Recordemos que grandes
genios tuvieron un bajo rendimiento e incluso desertaron del sistema escolar ( Edison,
Einstein, Bill Gates, deportistas, artistas).
3- Dieta
Alimentaria. Es sabido que una dieta adecuada ha revertido trastornos tales
como Autismo e incluso enfermedades tales como cáncer. Sugiero indagar en ello.
4- Apoyo
Psicológico. Si el DA tiene un origen emocional y/o social (reactivo del medio).
Espero haber sido un aporte informativo y para la comprensión de este tan cuestionado y debatida condición.
Atenta a dudas, consulta y/o comentarios.
Mariela Unda Apuente
Mariela Unda Apuente
